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Un paseo por las montañas Imprimir
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Viernes, 23 de Noviembre de 2012 10:06

Por Claudio Ruax desde Italia para Master News

 

He nacido y crecido en una de las llanuras mas grandes del continente Americano. Por lo tanto, a primera vista, escribir sobre los Alpes y su cultura sería algo lejano a la realidad paisajistica que me ha rodeado por tanto tiempo.

 Sin embargo, en estos años he tenido la posibilidad de disfrutar de la montaña en dintintos lugares del arco alpino. Las montes mas cercanos a donde vivo se encuentran en la región noroccidental de Valle de Aosta, aqui están los picos mas altos de Europa (Monte Blanco, Monte Rosa, Monte Cervino y el Gran paradiso). Valle de Aosta limita al norte con Francia y Suiza, de alli que los topónimos suenen más afrancesados que italianos.(Courmayer, Pont Sant Martin, Aosta, Valtournenche, etc), esta región fue parte del Piemonte hasta el 1945. La lengua oficial es la italiana y la francesa, también se habla el dialecto valdostano.y en algunos valles el dialecto walser. Los walser son una etnia de origen germana que emigrò en el siglo XIII desde la actual Alemania por razones todavia desconocidas y pobló territorios en Suiza, Italia, Francia y Austria.


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tipica casa walser

Hablar de los walser es hablar del valle del torrente Lys, o mas conocido como el valle de Gressoney. Entremos entonces.
Dejando atrás la autopista los hermosos paisajes montanos nos acompañan, pasamos por el pueblito de Fontaneimore con su puente medieval y su cascada y subimos a monte hasta llegar a Gressoney Saint Jean. Su pequeño centro historico es la clásica postal de navidad, casas en madera y piedra, techos nevados, faroles encendidos por las calles, castañas calientes, chocolates…
Hace unos años he festejado el año nuevo en este valle, como es costubre el 30 diciembre se realiza la bajada con antorchas y luego se bebe un buen vin brulè (vino caliente con clavos de olor, canela, nuez moscada y otros ingredientes). Gressoney es el lugar donde transcurrí mis primeras vacaciones en los Alpes, tal vez por eso me guste tanto, lo visito a menudo ya que puedo ir i venir en el día, dista unos 150 kilometros de donde vivo.



Paisaje invernal en Gressoney Saint Jean, al fondo el monte Rosa

No solo de vin brulé se vive por estos lugares. La bebida típica valdostana es un licor que se extrae por infusión y destilación de diversas plantas del genere de la Artemisa, que nacen en los Alpes centro-occidentales. El licor se llama Genepì.
Otra bebida tipica de esta región es el cafe a la valdostana. En este caso es particular no solo el preparado del cafe (grappa, etc) si no tambien el recipiente donde se beve que se llama Grolla. Es un recipiente redondo de madera con una pequeña tapa y existen para dos, cuatro, seis u ocho bevedores, que beben de los distintos picos que tiene la grolla (ver imagen). En general son entallados a mano por los artesanos de la zona.


Grolla

Trabajar la madera es un arte con raices profundas en la cultura alpina, sea en Italia como en Austria o Suiza. El material está al alcanze de la mano en los bosques que rodean estos pequeños pueblos.

 

Una mención especial merce las pistas de esquí.del Valle de Aosta. Kilometros y kilometros de pistas esperan al turista. Existen localidades con excelentes pistas de esquí de fondo, y hermosos lagos que cuando se hielan son estupendas pistas de patinaje.
Unos de los momentos más acogedores es el regreso de las pistas. Cuando cae la tarde, se vuelve al hotel o a la casa y despues de un baño no hay nada mejor que sentarse cerca de hogar acompañado por amigos compartiendo un licor, con la nieve que desde afuera encanta el atardecer.

Y así llega el momento de la cena en donde el apetito se entrega a delicias culinarias. El famoso queso Fontina es el rey del valle de Aosta. Producido aqui y dejado a estacionar en galerias subterraneas debajo de estas montañas, el Fontina es un queso de sabor agradable pero fuerte. Elemento escencial de la fondue de queso, acompaña las mesas valdostanas desde tiempos inmemoriales. Existen en diversos pueblos las cooperativas lacteas donde se pueden comprar excelentes fontinas a precios muy accesibles.

Quien no comería un plato de castañas con miel y lardo de Arnaud? El lardo es la parte grasa del cerdo. Es similar a la panceta pero en este caso, la feta de lardo es toda grasa con una sutil linea de carne. El lardo se coloca con especias en recipientes de marmol que vienen enterrados por un año. La carne valdostana es muy buena, los animales van a pastar en alta montaña al inicio de la primavera y vuelven los últimos días del verano. Un bife a la valdostana (con fontina y jamon) es un plato que tiene que ser probado. Obviamente aqui se producen vinos de excelente calidad, como el tinto Donnas, producido en la zona homonima..
Los dulces típicos como el strudel, se hacen en la region del Alto Adige, al pie de la cadena montañosa de las Dolomitas, donde la cultura alemana ha influenciado en manera notable los alpes italianos que limitan con Austria.

Estos cambios de culturas, dialectos, artesanías y cocinas, hacen que los alpes sean tan diferentes entre los distintos valles. Culturas como la francesa, la suiza y la austrico/alemana influenciaron estas montañas desde siglos, por ello los alpes son tan facinantes.

No quisiera dejar de menzionar la arquitectura alpina, que cambia de región a región, aqui llaman nuestra atención los techos de las casas,. Son construidos con losas de pietra tipo ardesia. Las tejas parecen fetas de ardesia. La piedra se deja al estado natural, creando una atmosfera de otros tiempos. Esta forma de construir se encuentra sólo en el Valle de Aosta.


Techos típicos del Valle de Aosta

 


Me olvidaba de una amiga fiel en los invernos alpinos, llamada la dama blanca..
Cuando se escribe sobre los Alpes la nieve es su elemento característico.
He descubierto la nieve de grande, una mañana se me apareció por primera vez.. y de alli en más no deja de encantarme año tras año. Todo es mágico cuando ella llega. Para mi es sinonimo de silencio. Cuando me despierto despues de una nevada, me doy cuenta antes de abrir la ventana, que ha nevado. La nieve crea un manto de silencio, los pasos se afelpan, todo parece detenerse…

Y asi llegamos al final de este día en las montañas. Volveremos? Cierto, quedan tantos valles y montes para contar., cada uno con una historia de siglos como las Dolomitas y tantas otras.

El fuego juega con la leña en el hogar, todos duermen.
Mientras nieva, desde el ventanal se ve la noche estrellada iluminando las picos de las montañas.
El descanso reparador, me espera. Buenas noches.

Claudio
 

Un paseo por las montañas