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Los farmacéuticos confirmaron que este viernes se suspenderán las prestaciones a los jubilados debido a una deuda millonaria

 

Como ya se había adelantado, el conflicto no parece tener solución, ya que a pesar de los reiterados llamados, pedidos de reuniones o algún tipo de respuesta, las autoridades del PAMI volvieron a hacer oídos sordos al reclamo y es por eso que las farmacias de la provincia de Buenos Aires, no brindaran este viernes las prestaciones como lo hace regularmente.

 

Isabel Reinoso, presidenta del colegio bonaerense, días atrás dijo a Hoy que la situación estaba muy complicada porque “la deuda de la provincia asciende a 350 millones de pesos” y eso se refleja en la gran cantidad de establecimientos que no pueden entregar los medicamentos, y por ende dejan al personal de vacaciones o directamente cierran las persianas de sus locales.

 

Este paro no solo tiene como fin la cancelación completa de la deuda que mantiene el PAMI con las farmacias, sino que hay otros conflictos de fondo que han salido a la luz a raíz de un problema mayor, como por ejemplo las altísimas bonificaciones que están aportando los farmacéuticos para la atención a esa obra social: “es la más grande del país y en los cuales nosotros cedemos más del 50% de nuestros honorarios” dijo Graciela Lujan -Presidenta del Colegio de Farmacéuticos de La Plata- a Hoy.

 

Ante un escenario del país realmente complicado, donde la recesión afecta a todos los comercios y la inflación aprieta el bolsillo de los ciudadanos, las farmacias vienen sosteniendo una prestación bajo convenios muy desactualizados y muy poco sustentables, “es necesario darle un giro de 180º a la situación, hace muchos años que los farmacéuticos estamos reclamando” enfatizó la presidenta del colegio platense.

 

En relación a lo anterior Luján recordó:  “nosotros aportamos el 16,6% para atender este convenio, es decir que por cada medicamento que, por ejemplo tiene valor público de $100, nosotros aportamos $16,60, y esa una cifra muy importante que nadie nos reconoce o no muchos saben”.

 

Por último es necesario remarcar que en este delicado contexto, sumado a la falta de pago de varios meses que equivalen a millones de pesos, los perjudicados siguen siendo los mismos de siempre, el eslabón más débil de la cadena: los jubilados y pensionados, quienes necesitan que PAMI efectué los pagos correspondientes para que la rueda de la comercialización vuelva a funcionar y las prestaciones se regularicen.

 

Tal vez por estos tiempos electorales, alguna autoridad escuche los reclamos que vienen de larga data y la situación se normalice para el bien de todas las partes.