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Hace unos días atrás un grupo de jóvenes llevó adelante una nueva edición del Concejo Juvenil Deliberante, dando muestra de una gran madurez y responsabilidad por parte de los alumnos que trabajaron en la modificación de algunos de los artículos de convivencia ciudadana. 

 

Considero, como lo pidieron los pibes que se debe difundir esa nueva ordenanza para que todos los ciudadanos la sepan y comencemos a respetarnos un poco mas entre nosotros y atender las señales de tránsito sobre todo, y no desconocer que las rampas de bajada en cada esquina tiene un función importante para toda persona que tenga hasta la mas mínima discapacidad. 

 

Lo que demuestra la fotografía es un claro ejemplo de desconsideración hacia el otro. Esto ocurrió cuando todos nos acercábamos a ordenar las carrozas, frente al Hospital Municipal para que se iniciara el desfile de las mismas. Entiendo que el o la conductora de este vehículo haya llegado quizá al límite de su tiempo para llevar a su niño o simplemente querer presenciar el despliegue primaveral que acontecía en la esquina, pero olvidó que estaba entorpeciendo la bajada o pasaje para una persona con una mínima discapacidad, ni querer imaginar lo que tuvo que hacer una persona que venía en sillas de ruedas y hubo que, entre varios, ayudarle a bajar su medio de movilidad. 

 

Creo que debemos ser mas conscientes cuando estacionamos nuestro vehículo y observar o tener en cuenta si no estamos cometiendo un infracción que condenamos socialmente y no solo eso, sino que le dificultamos el libre tránsito a una persona discapacitada.