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Cada cinco días un bebé recién nacido queda abandonado Imprimir
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Lunes, 17 de Noviembre de 2014 11:02
Un drama cotidiano.Son datos de Capital y Provincia. Durante el último año y medio fueron 110 bebés. Y la cifra crece todavía más si se cuenta a los chicos menores de un año.
 
Un cantero en Palermo y un cesto de basura en La Plata fueron las primeras cunas de Matilda y Joaquín. Apenas salidos del vientre de sus mamás conocieron la soledad, el frío, la humedad y aguardaron a la intemperie a las personas que los rescataron y así salvaron sus vidas. Fueron los últimos casos que se hicieron públicos, pero no son los únicos: en la Ciudad y la Provincia fueron abandonados al nacer unos 110 bebés recién nacidos en el último año y medio, a razón de uno cada cinco días.
 
Matilda se convirtió en la beba número 15 abandonada en lo que va de 2014 en Capital. El año pasado habían sido 28, según datos proporcionados por el Consejo de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes porteño a Clarín. En Provincia, 133 chicos de menos de un año fueron dejados en la calle, en el hospital en el que nacieron o en algún lugar sin un adulto que pueda y/o desee responsabilizarse por su cuidado desde enero de 2013 hasta junio último, según la Secretaría de Niñez y Adolescencia bonaerense. 
 
La mitad, bebés con pocas horas de vida, como Joaquín, que fue hallado hasta con restos de placenta, metido en una bolsa a fines de septiembre.Conocidos sus casos, muchas familias se ofrecieron para adoptarlos, sumadas a las que ya están en lista de espera. Pero no es un trámite automático, ya que la Justicia decreta el abandono recién cuando se agotaron las instancias para intentar determinar la identidad del chico. “Hay que indagar cuáles son las razones por las que encontramos a ese bebé. Hay que ver si lo dejó la madre voluntariamente o si se lo sacó el padre, o es una chica de 14 años encerrada víctima de trata a la que le sacaron al bebé. 
 
Cuando es así, no sale rápido en adopción porque hay que respetar su derecho a la identidad”, explica Guadalupe Tagliaferri, presidenta del Consejo porteño. “Aún en los casos en los que lo deja la madre, tenemos que poder encontrarla para ver si lo dejó porque no quiere tener ese hijo o había otras razones en las que el Estado puede acompañarla para que sea mamá, por ejemplo: una adolescente que la echaron de la casa, una mujer a la que su marido le pega y no quiere que maltrate al bebé, o una que tiene 10 hijos y siente que no puede más porque no tiene plata”, añadió.
 
“En el abandono, la ley da 30 días (prorrogables por otros 30 más) para ubicar a su vínculo afectivo, a algún familiar del bebé. En ese lapso hay que trabajar en obtener la documentación, en constatar la existencia de los familiares y rápidamente se hace una audiencia en la que se determina la adoptabilidad de estos nenes recién nacidos”, señala Pablo Navarro, secretario de Niñez y Adolescencia bonaerense, que tiene a su cargo 200 servicios de Promoción y Protección.
 
En el caso de Matilda, la familia del chico que la encontró se postuló como hogar de tránsito, pero la beba fue derivada a una institución (ver “El caso..”). Una vez agotados los plazos, y tras no dar con familiares de la beba que pudieran tenerla, en los últimos días fue a vivir con una familia a la que se le otorgó la guarda preadoptativa. Los chicos dejados en la calle son casos aislados. La mayoría de las veces los chiquitos son abandonados en los hospitales en los que nacieron, por mamás que se van antes de que les den el alta. Se recurre entonces a la partida de nacimiento para obtener los datos filiatorios e indagar en las causas del abandono. “El juez convoca a una audiencia en la que se trata de trabajar la revinculación a través de tratamientos psicológicos, el ingreso a programas de fortalecimiento, o alguna ayuda económica, en los casos en que ese haya sido el factor del abandono”, sostiene Navarro. 
 
De los 133 bebés dejados en Provincia, sólo en 77 se dictaron medidas de abrigo (fueron entregados a familias de guarda o alojados en hogares de bebés). En el resto, los chiquitos quedaron a cargo de algún integrante de la familia ampliada (como por ejemplo, tíos o abuelos).Al respecto, dice Tagliaferri: “Distinto es cuando la madre lo deja en el hospital y dice ‘me voy, no lo quiero’ y firma la adopción plena. Esos son los caminos más fáciles para que este bebé finalmente tenga una familia. Lo que pasa es que en Argentina lamentablemente no hay una mirada positiva sobre las mujeres que deciden voluntariamente dar su hijo en adopción. Entonces esa mujer lo hace a escondidas”. 
 
Cuando son dejados, “casi siempre es con la voluntad de que sean encontrados, hace unos años eran mucho más crueles los abandonos”, agrega Navarro.Dentro del drama que implica el abandono, la corta edad de los bebés es algo que juega a favor. “Los chicos abandonados son rápidamente entregados en guarda preadoptiva. 
 
En esto hay un círculo virtuoso de la Justicia, de los organismos proteccionales y de los aspirantes de adopción. Es que el 90% de los que quieren adoptar desean recién nacidos, que son muy pocos en relación a los otros chicos que están esperando, que son grupos de hermanos, con capacidades diferentes, o con patologías”, concluyó Navarro, que busca que su Secretaría disponga del registro de adoptantes (que ahora está en manos de la Justicia) para agilizar el proceso.
 
Fuente: Clarín
 
Cada cinco días un bebé recién nacido queda abandonado