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Ana María Cabrera: La necesidad vital de escribir Imprimir
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Sábado, 21 de Marzo de 2015 07:12
Por Estefanía Coronel para Master News
 
Después de unos meses de descanso retomamos con nuestra columna habitual. Este espacio donde nos permitimos conocer íntimamente a gente que hace de la palabra un arte y plasma en papel las más diversas historias. Dónde uno de los protagonistas principales, termina siendo el amor.
 
Hoy es el turno de Ana María Cabrera escritora y profesora  argentina autora de entre sus conocidos libros: “Felicitas Guerrero”: la mujer más hermosa de la república según el poeta Guido Spano (extracción del libro de la autora)
 
¿Cuál es tu formación profesional?
 
Toda mi vida es, fue y será la literatura.
 
Primero desde los 3 años hice teatro. Después del secundario estudié el profesorado en Lengua y Literatura. Gané una beca para perfeccionarme en España. Allí cursé 14 materias y una tesina en la Real Academia sobre la mujer expresada a través del léxico de la moda (en textos literarios). Siempre dando clases en Buenos Aires Capital y provincia. Se me ocurrió (me encanta estudiar) entrar a la UBA en Psicología. Hice 4 años pero no la terminé (aunque la amo. Te cuento un secreto: a veces me da muchas ganas de volver a retomar la carrera). Sin saber bien qué iba a buscar viajé a Los Angeles, California. Fui a la U.C.L.A. Y al poco tiempo me aceptaron para cursar el Master y dar clases a los estudiantes norteamericanos.
 
¿Cuándo decidís escribir?
 
Bueno, una noche como jugando cuando tenía 9 años. Era algo tan placentero que cuando mamá quiso que apagara la luz porque era tarde me quedé con gusto a quiero más. Sentía que este juego me abarcaba. Era como entrar a un mundo mágico. 
 
¿Qué motiva tu escritura?
 
Es una necesidad vital. Escribo aun cuando no escribo. Miro a una mujer, a una pareja y en mi mente se dispara una historia. Leo algo (una noticia, un dato interesante) y entonces empieza el “enamoramiento”. Si el personaje y yo nos buscamos, sin forzar nada, entonces sé que es para mí. Si no es así. Se va tal vez hacia otra escritora. En mi opinión el libro se tiene que dar naturalmente.
 
¿Cuántos libros tenés escritos y cuántos publicados?
 
Publicados tengo cinco y no publicados muchísimos. Tengo una columna en una revista “El amor en tiempos de Felicitas”. Y varios artículos periodísticos en California y Argentina.
 
¿Cómo creas a los personajes? ¿Hay alguno preferido entre ellos?
 
Bueno, la creación como el amor son sin porque. Mientras escribo ellos viven conmigo. No puedo hablar de preferencias. Son mis hijos literarios y como buena mamá los quiero a todos por igual. Cada uno me dejó algo. A Felicitas la amo porque fue la primera que me dio la mano para publicar. A Cristián porque es el hombre sensible y fuerte al mismo tiempo. Defendió los Derechos de la mujer en un siglo patriarcal, como fue el XIX. Para mí, el modelo de hombre nuevo. Muchas chicas me pidieron clonarlo.
 
Regina Pacini me conmovió por su generosidad, su amor al canto y a su hombre. Frente a la indiferencia y ninguneo de la sociedad pacata de su tiempo ella, que era portuguesa, nos regaló la Casa del Teatro, propició la creación de Radio Municipal y hace poco me enteré que también el Conservatorio Nacional de Música.
 
Y Macacha, por Macacha conocí Salta. Saboreé sus empanadas, bailé sus bailes, me enamoró su tierra. Gracias a Macacha conocí a nuestra amiga en común: la sensible y talentosa Andrea Vázquez.
 
Este año pasado salió Rituales Peligrosos. Novela actual, fuerte pero que sin golpes bajos nos enfrenta a la Violencia para que al aceptarla hablemos, denunciemos y sepamos que las mujeres si queremos y nos queremos podemos salir de la sumisión para elegir a la pareja en libertad.    
 
¿Qué época de la historia te sienta más cómoda para situarte?
 
No sé. Todas. Hasta ahora “viví” en el Siglo XIX con el atractivo de un intenso romanticismo, en los principios del XX en la espléndida Belle Epoque, la época actual y acabo de terminar una novela ambientada en Venecia del Siglo XVI donde brilla el arte, las telas los cristales, las fastuosas fiestas, la literatura y el goce de la vida.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
¿Cuál es tu mayor desafío a la hora de escribir?
 
Bueno, aquí sí que dejaste pensando….Desafío? cuando pienso mucho me da miedo. En cambio, cuando me relajo empiezo a disfrutar de la escritura, me meto a jugar dentro del libro y así sí se da la magia de la literatura. 
 
¿Cuánto tiempo le dedicás a la escritura?
 
Una vez, hace mucho tiempo, le pregunté a Pepe Carlos Gallardo, poeta español, esto mismo y entonces él me contestó:-Pues mira, maja, pregúntame cuándo no escribo. Porque escribo aun cuando no escribo.
 
¿Cómo fue escribir Felicitas Guerrero? ¿Por qué decidís contar su historia?
 
Al final de Felicitas en “Y mientras tanto” dije: Vida y literatura. Nunca sabré con exactitud cuándo, cómo ni por qué elegí a Felicitas Guerrero para escribir. ¿Elegí o me eligió? Porque sí. Porque no podía dejar de hacerlo. Mirá si alguien me hubiera ofrecido un suculento sueldo le hubiera contestado “Gracias pero cuando termine Felicitas”.  
 
¿Cuánto tiempo te lleva el proceso de investigación?
 
Mucho. Al escribir sobre personajes que no están en los diccionarios, que no son protagonista de la historia oficial leo libros, investigo en archivos, busco libros de cocina de época, revistas de moda, entrevisto a descendientes, viajo a lugares donde ellos estuvieron , los recorro, los vivo, los huelo, escucho la música de la época…
 
¿Qué tema te cuesta más abordar?
 
Los que siento que no son para mí. Temas muy cercanos, temas políticos, libros solamente para vender. Para mí escribir es un acto vital que siento con pasión. Hoy te digo esto y tal vez mañana escriba un libro de política o con temas económicos pero que los sienta no desde la conveniencia sino desde lo vivencial. No sé, las mujeres que elijo siento que todas tienen algo de mí.  Indago hasta encontrarles los puntos en común entre ellas y yo. Tras ese descubrimiento me es más fácil continuar
 
¿Cuál es tu meta como escritora?
 
Seguir escribiendo siempre. Tengo poemas que no publiqué, cuentos inéditos y también guiones teatrales que no terminé ni se estrenaron. Si, sueño con que algún día pueda ver mis textos en el teatro, la televisión o el cine. Esa es una deuda pendiente para conmigo misma. Otros lo hicieron con mis libros. Esta vez me toca a mí.
 
¿Estás escribiendo un nuevo libro?
 
Entregué uno a mi editora. Y tengo varios temas ya investigados. Siempre sobre mujeres.
 
¿Escribiste alguna vez algo que jamás publicarías?
 
No.
 
¿Qué leés habitualmente?
 
De todo. Todo rato que tengo leo. Desde el diario, psicología, vidas de Santos, y novelas históricas con mucho amor. Estoy feliz al ver a Viviana Rivero, Gabriela Exilart y tantas otras que escriben buenísimas novelas desde el lugar de los sentimientos. Con pluma eficaz con tinta de amor de mujer. Hacía falta. En la historia de la literatura tenemos muchas buenas novelas románticas escritas por hombres pero muy pocas por mujeres. Ellos nos tomaban como tema para escribir. Ahora nosotras somos sujetos de la propia historia.  
  
¿Nos recomendás un libro?
 
Tantos!!!En mi mesita de luz tengo una pila que va cambiando. Así esté muerta de cansancio necesito leer todas las noches. Poesía de Olga Orozco, “El Quijote”, “Los Conjurados” de Borges, “El cuarto propio” de Virginia Wolf….no sé. Te digo los que tengo en mi cuarto hoy: “Castilla para Isabel” de Jean Plaidy, “Relatos cómicos” de Edgar Allan Poe (lo compré el lunes en el Alto Palermo, no tenía ni idea), “La mujer rota” de Simone de Beauvoir y  “Siete motivos para no quererte” de María Border.   
 
Ana María Cabrera: La necesidad vital de escribir