Archivo Master News

La policía trabaja sobre la hipótesis de que la muerte de José Bengochea ocurrió cuando se bajó de la cosechadora que estaba tocando con la antena el cable de electrificación rural, y con su cuerpo hizo el circuito eléctrico. Su compañero Mariano Cravero recibió la mortal descarga de 13,2 kv (kilo voltios) cuando, tras verlo retorcerse, fue en su ayuda y lo tocó. El conductor de la cosechadora, al ver lo que ocurría, arrancó el rodado y recién paró a varios metros del lugar, por ello salvó su vida. 

 

“La hipótesis que tenemos es que aparentemente el maquinista estaba probando la densidad de la humedad y haciendo los primeros lotes con la máquina, cosechando soja. En ese momento, el maquinista José Bengochea, desciende de la máquina, hace contacto con la tierra y se produce la descarga eléctrica”, explicó el comisario Ricardo Padilla, jefe de la Comisaría Segunda que tomó intervención en el  caso..

 

Según se pudo averiguar, “la máquina iba a buscar al tractorero, que es la otra persona muerta, Mariano Cravero. Justo en ese sector la máquina se dirige hacia el tractor con la tolva y ahí pasa por debajo de los cables y tiene la descarga eléctrica. Cravero, aparentemente, cuando ve que su compañero se baja de la cosechadora y empieza a tener movimientos bruscos, cree que es un problema de salud y va en su ayuda. Cuando lo toca, le da la descarga también a él”, explicó el comisario.

 

Por otra parte, el contratista rural que conducía la máquina de su propiedad es de apellido Barbero. “Él no se baja, observa lo que pasa y se corre con la máquina a unos cuantos metros del lugar y recién ahí se baja. Todavía no tenemos su testimonio debido a que sufrió un  shock y un ataque de presión por lo que fue trasladado en forma urgente al hospital Centeno. Ya fue dado de alta, pero aún no declaró porque pidió estar con los familiares de la víctima”, relató el funcionario policial.  

 

La tragedia ocurrió de manera insólita, pues si la cosechadora no hubiera parado en ese lugar y no se hubiese bajado nadie a tocar la tierra, nada hubiera ocurrido, pues la gomas del rodado hacen de aislante de la electricidad. Si el compañero que estaba en la casilla se hubiera percatado del origen de los movimientos de Bengochea y no lo hubiera agarrado, tampoco hubiera perdido la vida. Solo Barbero, luego de ver como morían sus empleados, atinó a sacar la maquinaria del lugar y salvó su vida. 

 

 

Fuente: InfoPico