Archivo Master News

Cristina Alfonso (55) es una vecina de Santa Rosa que contó en Master FM 102.1 el calvario que padece desde hace año y describió la amenaza constante que vive por la violencia de la ex pareja de su hija Micaela llamado Braian Carra. Desde amenazas hasta golpes y quemaduras, e incluso provocar que se quede sin trabajo. Lo último que sucedió fue la quema total de su domicilio el pasado sábado 9 de diciembre.

 

“Iban 24 y ya ahora 25, 26... Son 27”. Micaela Cuta hace la cuenta y responde sobre la cantidad de denuncias que hizo contra Braian Carra por distintos episodios de violencia de género, que fueron desde amenazas por chat hasta quemaduras con el caño de escape de una moto. Casi 30 denuncias y ni las órdenes de restricción ni el botón antipánico (que lo tuvo que pedir) impidieron que el sábado intentara prender fuego la vivienda donde vive con sus hijos (que también son los hijos de Carra) y su mamá.

 

Cada vez que la lesionó, las heridas (golpes, quemaduras, cortes) fueron constatadas por un médico policial. Pero le siguieron pidiendo testigos presenciales. Incluso el año pasado la intentó apuñalar en la calle. 

 

Hace dos meses hubo otro episodio donde intentó incendiar la habitación del fondo de la vivienda, donde vive. Y también la tiró de la moto cuando la cruzó yendo a un cajero. Lo máximo que había logrado eran restricciones de acercamiento (150, 200 y 300 metros) pero Carra las violaba sistemáticamente. “Cuando está acá, aprieto el botón antipánico y la policía llega rápido, pero él ya no está”, explica.

 

La relación comenzó cuando tenían 15 años. Hace cuatro que están separados, aunque ella hizo un intento por recomponer la relación y fue cuando quedó embarazada de la hija más chica, que hoy tiene 3 años. A los 5 meses de embarazo Carra la dejó internada tras una golpiza y Micaela decidió separarse definitivamente. Pero el infierno nunca terminó.

 

Cristina Alfonso, madre de la joven damnificada, hablo en forma exclusiva para Master FM 102.1 y Master News

 

¿Qué paso…?

 

“Ese día nos fuimos a acostar tarde porque nos habíamos juntado toda la familia, y mi nieto de 6 años se quedó mirando la tele, “el me decía te cuido la casa”, habré dormido media hora y llega el nene diciéndome que me levantara porque me iba a morir, decía que el Braian había quemado el sillón, salí y vi fuego en el sillón, fui al patio, traje agua y al ver mi casa prendiéndose fuego me desvanecí, volví a mi casa a las 6 de la tarde, siempre mi vida fue así, era agresivo con mis hijos, pero no puedo hacer nada porque nunca hay testigos, los únicos son mis hijitos, y siento que solo les queda matarnos, en un minuto me quemo todo y me arruino, me consuela saber que a mi nieto no le paso nada…” – cuenta Cristina relatando más situaciones desgarrantes…

 

No le importa nada

 

“Sabe que mi nieto esta todo el día conmigo, podrían haber estado sus hijos, cualquiera, no le importa nada, hace 4 años que vivimos un calvario, no somos dueños de nada, los chicos andan mal en la escuela, le tienen terror a su padre, viven a la defensiva esperando cualquier cosa, porque los chicos entienden todo, saben todo, se dan cuenta de todo…”

 

Está protegido

 

“Es soldado voluntario, y para nosotros está protegido por alguien, había perdido permiso para irse a salta el sábado, y para mi estaba planeando todo, porque no se fue a ningún lado, supimos de que viajaría porque nos dijeron en el mismo trabajo de el…”

 

No quedo nada

 

“No me quedo nada de la casa, tengo que empezar de nuevo, mi marido le había hecho un departamentito detrás de nuestra casa porque sospechaba que algo le pasaba a mi hija…, nosotros nos quedaremos igualmente acá, tengo nietos por los que velar, si tengo que hacerle juicio al estado, lo hare, no voy a parar, siempre trataron a mi hija como a una loca, no quiero que mis nietos crezcan en la violencia, no lo voy a permitir…” – aseguro Cristina.

 

ESCUCHA LA ENTREVISTA COMPLETA