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Por Fernando Soriano 

 

Relataron cómo fue el choque por el cual Franco Catanzaro, de 7 años, perdió la vida

 

Aunque la escena se repite cada día de cada temporada de verano entre los médanos de Pinamar, Cariló, Villa Gesell y el Partido de la Cosa, todavía resulta inexplicable la imagen de un chiquito a bordo de un cuatriciclo, solo y en marcha. Esa foto podría ser de cualquiera, y también fue la de Franco Catanzaro, el nene de 7 años que el domingo a la tarde murió tras chocar con otro vehículo similar conducido por un joven de 23 años.

 

A pesar de las versiones que circularon desde entonces, los investigadores judiciales confirmaron durante la noche del lunes que Catanzaro conducía solo (sin la compañía de un adulto) un cuatriciclo Yamaha 90 cc. por una zona de médanos vivos conocida como La Olla, cuando al bajar por una de las dunas se encontró subiendo, de frente, el Yamaha 450 que manejaba Agustín Ciari, un quilmeño de 23 años.

 

El fiscal del caso, Martín Prieto, escuchó el relato del adulto que estaba a cargo de Franco en el momento en que el nene se subió al cuatri. Su papá había salido a caminar por la playa y Catanzaro, junto a un adolescente de 12 años, salió a andar en dos cuatris mientras el hombre los vigilaba desde su gazebo en la orilla. Este señor contó que los venía supervisando y que pudo observar cuando se aproximaban Ciari junto a otra persona en otros dos cuatriciclos. Y que ahí perdió de vista la situación detrás de un médano.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El Yamaha 450 que conducía Agustín Ciari, de 23 años

 

Eran cerca de las cuatro de la tarde y al minuto, según lo que dijo ante el fiscal Prieto, el hombre vio llegar al chico de 12 con Franco gravemente herido, a bordo del cuatriciclo de mayor cilindrada. Junto a ellos venía Ciari, quien se quedó en el gazebo donde estaban el papá y los amigos de Catanzaro y pidieron auxilio.

 

Desde el barrio Costa Esmeralda, un espacio de viviendas privado, donde tiene una casa el papá de la víctima (que vive en San Isidro) aportaron una camilla y con ella trasladaron al chico en una camioneta al hospital de Pinamar, aunque en el camino se cruzaron con la ambulancia que los iba a socorrer. Allí trataron de reanimarlo pero no hubo caso: 45 minutos después del choque, Franco llegó al hospital sin vida.

 

"Está confirmado que Franco conducía él solo y el impacto habría sido, según dijo el menor que estaba con él, muy fuerte", explicó una fuente judicial a Infobae. El fiscal Prieto llamará a testimonial al adolescente que acompañaba a Catanzaro en las próximas horas. Lo mismo hará con el primo de Ciari, quien fue el primero en contar en sede policial que el chiquito no había sido atropellado cuando caminaba por la arena, sino que manejaba un cuatri.

 

Catanzaro llevaba casco puesto, pero el impacto fue tal que no sirvió de nada. Las lesiones más contundentes fueron en el tórax, donde no tenía protección. Pero el casco se rompió y los golpes en la cabeza también resultaron determinantes. "El chiquito murió por los golpes, sobre todo los que sufrió en la parte torácica", explicó un perito.

 

La situación de Ciari es la misma: está imputado por el delito de homicidio culposo. Los investigadores esperan las pericias accidentológicas para determinar cómo sucedió el incidente y a partir de allí decidirán cuándo lo citan a declaración indagatoria. "Nos faltan pericias en sangre, mecánicas sobre vehículos, accidentológica y planimetría. Eso va a llevar unos días", detallaron a este medio fuentes del caso.

 

La zona de La Olla es un sector privado. Al igual que sucede en "La Frontera" de Pinamar, a escasos kilómetros de allí, no es posible la intervención policial porque los terrenos no son públicos. En el Partido de la Costa circular con vehículos por la playa está prohibido desde 2008. Sin embargo, del mismo modo que en Pinamar, no se puede controlar más que en los accesos. Adentro es arena de nadie.