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Nació un nuevo Yaguareté en el Complejo ECO de Rivadavia Imprimir
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Lunes, 26 de Febrero de 2018 16:07
Desde la ONG en sus redes sociales contaron su alegría por el nuevo nacimiento que sucedió en el Complejo que esta enclavada en el Vivero Forestal de América.
 
LO QUE EXPRESARON 
 
El 2017 había sido un año prodigioso para nuestro Complejo Ecológico. Habíamos logrado el primer nacimiento de un Yaguareté, el día 9 de Septiembre, luego de más de 5 años de no lograrse ningún nacimiento en los Programas de Conservación de todo el país de esta especie en estado crítico de extinción.
 
A finales de Diciembre, el hijo de Arami ya contaba con tres meses y estaba siendo amamantado por su madre. Los flamencos nos deleitaban con su sonora actividad de cortejo y de un día para el otro, habían construido más de una docena de nidos. Pero el año que todavía no se había terminado, nos deparaba una sorpresa más!.
 
Así fue que la madrugada del 27 de Diciembre, Yvoty, otra de nuestras jaguares, pare a su primer hija. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Sin embargo, a medida que pasaban las horas un motivo de preocupación se comienza a instalar en el Equipo de nSeguimiento: por alguna razón Yvoty, si bien se hacía cargo de su hija acicalándola y transportándola de un lugar a otro de su cubil, no la amamantaba. Inquietos ante esa situación, dejamos que transcurran algunas horas con la esperanza de que la primeriza madre comience a alimentar a su cachorra. A la madrugada del 28 (03 a.m.), antes de que transcurran las primeras 24 hs. y cuando ya no se podía dilatar más esa situación, tomamos la decisión de retirar la cría (que a esta altura deambulaba sola a tientas), para comenzar a amamantarla en forma artificial con mamadera. Esa misma noche luego de una intensa búsqueda de los elementos necesarios para procurar la dieta correcta a la recién nacida, encaramos la crianza a mamadera, nada menos que de un Yaguareté…
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Hoy, transcurridos casi dos meses de aquella experiencia, EIA, hija de Tupá e Ivoty, está fuerte, juguetona y llena de vitalidad, sin saber en su inocencia que forma parte del Reservorio Genético que en un futuro puede permitir repoblar los bosques y selvas en los que nuestro gran felino existió y por cuestiones antrópicas ya no lo encontramos.
 
Estamos felices, exultantes, con más ganas de trabajar que nunca por su especie. MUCHAS GRACIAS a todas las personas que con su colaboración, hacen posible que en nuestra O.N.G., triunfe la vida!
Nació un nuevo Yaguareté en el Complejo ECO de Rivadavia