Salió al cruce de las críticas opositoras: dijo que en estos tres años "se crearon 500 mil puestos de trabajo", puso en duda el cierre de Pymes "porque tienen el cuil abierto" y remarcó que la deuda de su gestión es casi la misma que la que heredó de Scioli.

 

En plena campaña electoral, la gobernadora María Eugenia Vidal salió a dar respuesta a algunos de los temas que plantea desde la oposición. Claro que lo hizo a su manera: en lugar de mostrarse “a la defensiva”, le mostró los dientes a los legisladores e intendentes del Frente de Todos.

 

Fue anoche, durante una entrevista en “Debo decir”, con Luis Novaresio. Primero puso en dudas las cifras que hablan de un dramático cierre de PYMEs en territorio provincial. “Para que una pyme se considere que dejó de funcionar tiene que tener el CUIL (SIC) inactivo durante un año”, aseguró Vidal, tras lo cual propuso “hablar con rigurosidad”.

Luego contrarrestó asegurando que desde 2015 a la fecha “se generaron 500 mil puestos de trabajo en la Provincia”. “Hay más desocupación porque hay más crecimiento de la población y porque hay más gente que busca trabajo… probablemente haya un problema de ingresos”, opinó.

 

También buscó contrarrestar las denuncias de la oposición en torno a la disparada de la deuda bonaerense. Dijo que “la deuda registrada de Scioli eran 9 mil millones de dólares”, pero que en total la administración anterior “debía 11.500” porque había “deuda que no estaba en la deuda”.

A eso le opuso los datos actualizados de la economía: “Hoy la provincia debe 12 mil, un 5 por ciento más”, continuó, repitiendo el “truco” del ministro Hernán Lacunza para no admitir que medida en pesos –que es la moneda en la que recauda un estado provincial-, se quintuplicó y ya compromete más del 60 por ciento del presupuesto anual.

 

Fuera de esos tecnicismos de índole económica, Vidal clavó una espina política en el Frente de Todos, al recordar que el espacio votó a favor de los pedidos para autorizar el endeudamiento que cursó a la Legislatura. “Muchos de los que integran la lista del frente para todos votaron ese endeudamiento”, señaló.

 

Con esa frase, Vidal metió una cuña en la unidad de un peronismo que intenta curar sus heridas internas. Es que en los tres años de gestión, intendentes y legisladores se diferenciaron por su nivel de oposición al oficialismo. Y definieron bandos bien caracterizados que ahora se apretujan bajo el paraguas del FdT.

 

“Todos los intendentes, de todos los municipios, de todos los partidos políticos, recibieron fondos de esa deuda para hacer obras. Esa deuda se ve en las obras”, remató.