Lacho está de vuelta y con más ganas que nunca Imprimir
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Miércoles, 03 de Abril de 2019 11:04
Horacio Lacho Cabral el campeón de boxeo e hijo pródigo de Rivadavia, está de vuelta. Tras sufrir una lesión a finales de 2018, comenzó a recuperar el ritmo y a los 30 años quiere volver con todo con alguna actuación en el exterior y con la intención de recuperar los títulos que alguna vez supo ostentar.
 
Mientras tanto ayuda a su esposa en el comercio que abrieron el año pasado, con  las ganancias de su pelea en Londres. En esa despensa, bajo el cartel “golpe a golpe” en el que también se lee “la vida en un puño” habla mano a mano con Oeste BA con la humildad de los campeones. “Tuve que parar para recuperar el hombro, era necesario tomar un descanso y ahora estoy volviendo con fuerza, con la intención de intentar nuevamente afuera”.
 
También realiza guanteos de preparación con la campeona Laura Griffa, “hago de su sparring, tiene una pelea difícil, pero es la pelea que todos quieren, estoy orgulloso de que me elija siempre que tiene una pelea, sabemos el poderío que tiene y ojalá se le dé y traiga una victoria para nuestro país y nuestra región”.
 
Lacho admite que el año pasado casi colgó los guantes, la lesión de fin de año casi lo hizo dejar “pero ahora tengo fuerzas para volver, me siento bien”. El rivadaviense fue campeón latino e internacional, pero nunca le dieron le oportunidad por el título argentino, una espina que quiere sacarse, aunque en sus planes está competir fuera de las fronteras nacionales porque las bolsas se pagan en dólares y allí los deportistas nacionales hacen la diferencia.
 
“Nunca pensé que iba a pelear en el exterior. Tuve la oportunidad, en mi vida logré mucho más de lo que pensaba, pero no me quiero quedar con esto, aún tengo más para dar”. Dijo además que las oportunidades “hay que aprovecharlas” y que no dejará pasar ninguna en esta etapa “estoy tranquilo porque siempre di todo”.
 
-¿Cómo es tener una gigantografía con tu imagen en el acceso a la ciudad?
 
-Eso me pregunto yo, ¿por qué estoy?. Pero para mi es importante que mis hijos la vean.
 
Es padre de dos hijos uno de 9 meses y otro de 6 años. “Toda mi familia fueron boxeadores, no me gustaría que mis hijos lo hagan. Me gustaría verlos jugar al fútbol y no verlos en el ring. La familia siempre sufre cuando uno está boxeando”.
 
Cae la tarde, los vecinos abren la puerta y suena el timbre del almacén. Allí entre gaseosas, latas de conserva y paquetes de fideos, el campeón de boxeo se gana la vida y sueña con lo que viene. Se me ocurre preguntarle ¿qué es más difícil esquivar un cross a la mandíbula o un gancho al hígado, o conformar a las señoras que buscan tomates buenos para la ensalada?, ríe y acompaña con complicidad la chanza y enfila para el lado de las verduras en búsqueda de una respuesta que ya dio aunque nunca habló.
 
Fuente: Oeste BA
 Lacho está de vuelta y con más ganas que nunca