Rusia 2 (3) - Croacia 2 (4): Te vas de tu casa Imprimir
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Sábado, 07 de Julio de 2018 19:03
Por Nicolás Montalá
 
Rusia le dijo adiós a la Copa del Mundo que organizó. A Croacia no le sobró nada, pero se impuso en los penales, eliminó al anfitrión y pasó a la semifinal por segunda vez en su historia. Ahora lo espera Inglaterra. 
 
El dueño de casa se fue de su propia fiesta. Del agasajo que él mismo armó y en el que seguramente muchos nunca pensaron que llegaría a tan altas horas de la madrugada. Se habían ido muchos invitados ya y le tocó irse al organizador, nada menos. Sin sobrarle tela, con lo justo y también con algunos pasajes de zozobra, Croacia tuvo un mayor temple en los penales (por esa vía también había superado a Dinamarca en octavos), le mostró la puerta de salida al anfitrión y por segunda vez en su historia se metió en la semifinal de un Mundial, luego de hacerlo en Francia 98, donde terminó tercera. Ahora, después del desgaste que significaron los 90 minutos, más el alargue, espera a Inglaterra.  
 
No alcanzó el coraje de Rusia para remontar el 1-2 y poner las cosas iguales en la chapa en la segunda parte del suplementario. La arenga del técnico Cherchesov, quien levantaba sus brazos pidiendo el apoyo del público, quedó sólo en un ademán. Las lágrimas rusas en el desenlace dramático contrastaban con la alegría delirante de un rival que no tuvo sus mejor día, aunque sí fue algo más prolijo desde los pies de Modric y no muchos más que eso...
 
 
La decepción de Rusia, que quedó afuera del Mundial.
 
Resultaron una tentación constante las inseguridades del fondo de los organizadores de la Copa del Mundo, fragilidad que los croatas no siempre supieron usufructuar por falta de chispa, de cambio de ritmo, de profundidad. Un mejor manejo de balón del elenco comandado por Dalic, inocuo en gran parte del encuentro, contra un adversario que se dedicó más a contraatacar, mandar centros y esperar en su campo cn endeblez.
 
Un gol de otro partido es el que se sale del contexto, que nada tiene que ver con el desarrollo, con la oferta del espectáculo. Así, con ese matiz, Rusia había golpeado en el puso 1-0: Cheryshev se hizo espacio al andar, sacó un zurdazo hermoso y la clavó en el ángulo derecho de Subasic. Poco pasaba hasta ahí. Y más pasó después. Llegó un retroceso pésimo de los anfitriones, llegaron los desacoples, llegaron todas las fallas juntas en una misma jugada. Y llegó el cabezazo de Kramarik para poner las cosas 1-1. Hubo más goles, pero en un partido de bajo vuelo futbolístico, ordinario por momentos.
 
Hubo que esperar hasta el final, a los penales que hicieron lucir a Subasic (le atajó el primero a Smolov), a Akinfeev (le detuvo uno a Kovacik) y expuso la muy mala ejecución de Fernandes, que le erró al arco... Rusia, el dueño de casa, se fue por la puerta de atrás. Croacia lo echó de su fiesta.